Disciplina
                                                                                                                                                                                        
                                                    
                            
                                                                                                  
                                        Más fruto
                                    
                                                            
                Autor:
      G. André      
                                    
                                                            
                                    
                                                                                                                                                                
                                
                            
                                                            
          
                    
                                                
                                
                                    
                                
                                            Precio normal:
                                    
                                
                                
                    3,10 CHF
                                    
                                            
        
                            
            
                            
                                                                    
                        
                                                    
                        
                                                    
                                    Nuestro tema parece austero a primera vista, sin embargo es muy actual. A menudo los jóvenes y los menos jóvenes se preguntan: «¿Por qué permitió Dios tal acontecimiento en mi vida? ¿Por qué perdí mis exámenes? ¿Por qué mi madre está enferma? ¿Por qué este duelo?». A tales preguntas se dan dos grandes categorías de respuestas; una es la del fatalismo: «Estaba ya escrito; solo hay que aceptarlo y someterse, porque es inevitable». La otra respuesta, la cristiana, es muy diferente: «¿Qué quieres enseñarme?».